27 septiembre, 2009

Reencuentro de ojos y brazos

Me gusta el asombro de mi cuerpo,
de mis labios que hablan inesperadamente,
mis brazos te ciñen, te desgarran.
Estos nuestros cuerpos una vez se acercaron,
es ahora cuando se reconocen.
Fabuloso el suceso de atracción, contracción, expansión,
explosión en mi cintura.
"Nosotros, los que fuimos, ya no somos los mismos."
Algo se ha reconciliado.
No sé de qué te perdono pero:
-ven, te abrazo-
Perdóname tú a mí:
dame un beso de más,
fraterno, amoroso,
Se felinamente tierno:
huele, lame, muerde,
ronronea, luego protege.
Yo: me descubro entera, linda,
divertida, esencial.
Soy clara,
mis otras caras son para caminar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

ay de la noche y sus dudas, pobre de la vida que se desperdicia en heridas, pero malditas sean las palabras que no obtuvieron respuesta pues vagarán por... ...en soledad

buenos días